26 junio 2012

Y ahora cigüeñas negras.


Hace unos días os dejaba un enlace a una cámara que transmite en tiempo real y gracias a la cual podemos seguir en cualquier momento con sonido incluido, la evolución de unos polluelos de águila pescadora en su nido.  Al final he indagado y el nido está al sur de Estonia, en una zona usada por el ejército de ese país para sus maniobras y donde estas aves tienen un buen territorio para alimentarse.  Todo esto forma parte de un proyecto para el estudio del águila y la cámara se instaló junto al nido para observar a los animales y regalarnos, a través de internet, la vivencia a quienes queramos compartirla.

Las mismas personas tienen otro proyecto también en Estonia, esta vez con un nido de cigüeña negra, y también hay una cámara que nos permite verlo en tiempo real. Pocas veces la tecnología ha colaborado más a que las personas se encariñen con los animales y sigan su vida como si formase parte de la suya. Si pulsáis sobre la imagen que tenemos al lado y todo funciona bien, abriréis otra ventana indiscreta, esta vez a la casa de una familia de cigüeñas negras.  Otra familia para presentar a los niños, Paqui.

6 comentarios:

Paqui dijo...

Paco, muchísimas gracias por la información y por presentarnos a la nueva familia.Claro que se la daré a conocer a los niños.Espero que disfruten como yo.Un abrazo

El viejo farero dijo...

Sin duda alguna que disfrutarán, además, apuesto a que si lo terminan viendo en el cole cada mañana lo primero que te van a pedir será ver el nido.

Un beso Paqui.

Unknown dijo...

Paco, hoy he tenido la necesidad de llegarme hasta tu espacio. Es una necesidad que me dicta el alma, cada vez que necesita relajarse, cerrar los ojos y vibrar. No importa sobre qué escribas, siempre es un placer. Sean faros, nidos, historias sobre el pueblo, las marismas... o María...o el Farero. Llego para recibir ese abrazo que brindas tan generosamente. Llego porque al estar aquí me siento en Andalucía, esa tierra que tanto amo, pero mucho más aun... me siento en ese lugar inefable que todos buscamos, en el que se reparan nuestras horas y nuestras prisas... en dónde uno siente que vuelve a nacer. Gracias Paco/Farero. Un abrazo muy fuerte desde Ciudad de Buenos Aires.

El viejo farero dijo...

Leo tus palabras y una leve sonrisa se dibuja en mi cara, ¿sabes por qué? pues porque muchas veces yo he entrado a "tu café porteño" guiado por la misma necesidad. Ojalá los abrazos de verdad se pudiesen mandar por este medio y que llegasen a sus destinatarios como lo hacen las palabras o las imágenes, ojalá pudiese darte ahora ese abrazo sincero y cariñoso de amigo.

Un beso desde Andalucía.

Adelina dijo...

Me encanta...

Un beso muy grande.

El viejo farero dijo...

Me gusta que te guste. Un montón de besos madrileña preferida.